En plena Semana Santa de 2022, visitamos Valverde de los Arroyos, un referente de los pueblos negros de la Sierra de Guadalajara.
Se trata de un percioso y pequeño pueblo que se ve bastante rápido, así que es más que recomendable combinar la visita con la Chorrera de Despeñalagua, una serie de saltos de agua, que en conjunto suman unos 120 m., ubicada en un enclave espectacular.
Para completar el día, de regreso a Madrid paramos en Tamajón, que también merece una pequeña parada. Queda pendiente visitar la otra parte de la sierra, los pueblos de Majaelrayo y Campillo de Ranas, así como la ruta de la Cascada del Aljibe:
Índice
Ruta a la Chorrera de Despeñalagua
4’5 KM | 1H | Baja | 144 M. | Todas | No | Sí | No |
Valverde de los Arroyos
Es el máximo representante de los pueblos de Arquitectura Negra, en la Sierra Norte de Guadalajara. Aquí los pueblos presentan tonos dorados, debido a que sobre el armazón de madera, la cubierta de pizarra se intercala con el uso de la cuarcita:
Parking
El mejor lugar para dejar el coche es en este parking gratuito, a la entrada del pueblo, subiendo una cuesta que lleva al cementerio. Existe otro parking en el centro del pueblo, pero sólo pueden aparcar los residentes:
Desde el parking, no hay más que bajar la cuesta, desde donde se puede contemplar una de las vistas más bonitas del valle y Pico Ocejón:
Plaza de María Cristina
Se trata de una plaza abierta, amplia y muy luminosa, con una peculiar fuente en el centro:
Es el lugar de reunión del pueblo, y donde aún se conservan algunas tradiciones, como la del juego de bolos, típico de Guadalajara:
El pueblo está muy bien conservado, es de los más grandes de la zona y tiene unas vistas impresionantes:
Aparte de algunos restaurantes, hay tiendecitas donde poder comprar productos de la zona: miel o castañas.
Iglesia de San Ildefonso
Fue construida en al año 1854, costeada por los hermanos Pedro y Manuel Monasterio Mata. Nacidos en Valverde, eran frailes y ejercían su actividad en Filipinas. Desde allí, enviaron los 46.000 reales para la obra:
Casas tradicionales serranas
Los valverdeños han sabido mantener la arquitectura tradicional evitando la tentación del uso de materiales más asequibles:
Los elementos característicos lo componen materiales propios de la tierra: piedra, pizarra, madera y barro. Con frecuencia en las fachadas se incorporan también cubiertas vegetales (rosales, parras, yedras) que ofrecen un triple beneficio: aislamiento, embellecimiento y producción.
La pizarra es el elemento constructivo principal que justifica la denominación e imagen que ofrecen los pueblos negros; se utiliza tanto en las cubiertas como en los muros:
Mientras que en la zona de Majaelrayo y Campillo se utiliza con más profusión la pizarra en los muros, en el caso de Valverde, y también Palancares y Almiruete, se mezcla con más profusión con piedra caliza y canto rodado, daándole un toque más dorado:
En cuanto a su interior, la mayoría tienen establo, cuarto de herramientas, cocina, patio, salón, comedor y los dormitorios:
Ruta a la Chorrera de Despeñalagua
La ruta es muy corta (4’5 km i/v) sin apenas desnivel, apta para todos los públicos (incluidos niños muy pequeños) y está bien señalizada. Es aconsejable ir temprano para evitar aglomeraciones (nosotros al ser Semana Santa encontramos mucha, mucha gente), llevar calzado resistente al agua (hay alguna acequia que encharca ligeramente algunos lugares y las rocas resbalan un poco) y no es posible hacerla con carritos de bebé.
Campo de fútbol
Atravesamos la plaza principal de Valverde de los Arroyos tomando dirección hacia la parte alta del pueblo, saliendo al campo de futbol. Me pareció un paisaje brutal, una alfombra verde con el Ocejón detrás vigilante:
Parque infantil
Si el campo de fútbol es espectacular, el parque infantil, unos metros más adelante, no se queda corto. Tus hijos no perdonarán echar un rato en alguno de los dos sitios:
Vistas al Pico Ocejón
El comienzo de la ruta arroja unas vistas maravillosas del Ocejón a nuestra izquierda.
El camino discurre entre huertas y árboles frutales, siendo bastante ancho, pero poco a poco se va estrechando al igual que el valle:
La subida al Pico Ocejón es una de las más conocidas de la zona. La ascensión puede durar entre 2 y 3 horas:
Al poco de avanzar veremos una bifurcación, el camino de la derecha va hacia la montaña y el izquierdo (el cual tomaremos), a las cascadas. La ruta se encuentra señalizada, aunque de cualquier modo no tiene mucha pérdida, ya que una vez tomada esta bifurcación hay que seguir siempre de frente:
Todo el camino es sencillo, pero bastante estrecho. A nuestra izquierda nos acompaña siempre un buen terraplén, por lo que hay que tener cuidado con los niños y atarles en corto:
La vegetación se va transformando poco a poco: pies de roble y un extenso brezal salpicado de vez en cuando por castaños:
Chorreras de Despeñalagua
Estamos cerca del objetivo. Una ventaja que le veo a esta ruta, es es que es bastante agradecida y se va viendo la cascada desde bastante antes de llegar:
A unas pocas decenas de metros, ya obtenemos una vista espectacular del anfiteatro natural que forman las paredes de roca con el discurrir del agua:
El agua cae sobre escalones de piedra que descienden más de 120 metros con las aguas del deshielo del Ocejón y el Campachuelo, a través del cauce del arroyo de la Chorrera, afluente del río Sorbe:
Las chorreras están presentes durante todo el año, especialmente durante la época de deshielo, aunque en invierno suelen encontrarse heladas:
Tras deshacer el camino, ya que el recorrido lo hicimos lineal (hay posibilidad de hacerlo circular volviendo por la montaña), comimos en uno de los tres restaurantes que hay en Valverde, y tras dar un último paseo volvimos a Madrid, haciendo un alto en Tamajón, la puerta de entrada a los Pueblos Negros.
Tamajón
Se encuentra en la comarca del Ocejón y alberga vestigios de un pasado de señorío en el que tuvo un gran esplendor en los S. XVI y XVII:
Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción
De origen románico, su construcción data del S. XIII. Presenta una planta rectangular y destaca la galería porticada del lado sur:
En el interior, destaca la Capilla de los Montúfar:
Fuente y Antiguo Abrevadero
En el extremo norte del pueblo, casi enfrente de la iglesia, aunque al otro lado de la carretera, se encuentran la Fuente Nueva, el lavadero y el pilón, recordando la importancia que tuvieron en el pueblo hasta no hace tantos años:
Plaza Mayor
Punto neurálgico en el centro del pueblo, destacando los bancos, la fuente y la galería porticada:
Ayuntamiento (Palacio de los Mendoza)
Actual sede del Ayuntamiento. Se construyó con piedra caliza durante el Renacimiento (S XVI) y perteneció a la familia de los Mendoza hasta el S. XIX, consevándose su escudo de armas sobre la puerta de entrada:
Casa Rural La Posada
Establecimiento rural con encanto. Cuenta con una decoración clásica con muebles antiguos. Dispone de restaurante y jardín:
Casa Familiar del Poeta José María Alonso Gamo
Muy cerca de la plaza se ubica la casa familiar de uno de los principales referentes culturales de la provincia de Guadalajara durante el S. XX, siendo conocida sobre todo su obra como poeta y ensayista, logrando el Premio Nacional de Literatura. Fue nombrado hijo adoptivo de Tamajón en 1986:
Existen otros puntos de interés en Tamajón: la Ermita de la Virgen de los Enebrales (de donde parte la ruta de senderismo de la Ciudad Encantada de Tamajón), la Ermita de la Soledad o la Laguna de Tamajón.